Como personas racionales y
preocupadas por nuestro bienestar, cuando necesitamos ayuda del peluquero, del médico o el carpintero
acudimos a estos por un problema específico (un nuevo corte de cabello, dolor
físico o simplemente el arreglo de nuestra mesa).
¿Qué ocurre cuando creemos que
ese problema es invisible? Simplemente lo ignoramos y dejamos que, con el pasar
del tiempo este sea tan insignificante que lo olvidemos, sin embargo sabemos de
cierta forma que se encuentra latente muy en el fondo esperando cualquier
descuido para escapar y hacernos pasar desde unas buenas noches de insomnio
hasta intenso malestar psicológico.
¿PERO
CÓMO SÉ QUE NECESITO AYUDA PSICOLÓGICA?
1). Primeramente, para que
se nos genera malestar psicológico (insomnio prolongado, estados de ánimo por
debajo de nuestro estado habitual persistente, llanto en exceso,
distanciamiento de los demás, entre otros), algo tuvo que habernos pasado, hoy,
la semana pasada o bien varios años atrás (muy en el fondo siempre
sabemos cuál es el problema, pero es difícil reconocerlo), para pensar
obviamente que algo no anda bien.
2). Segundo que todo, si
bien muchas personas conviven y “manejan” su malestar psicológico otras no lo
consiguen, lo cual empieza a verse reflejado en el trabajo, la universidad, las
relación con nuestras personas amadas y en general ese problema se extiende a
todas nuestras esferas personales, ocasionado un bajo rendimiento que puede
poner en riesgo ahora no solo nuestra tranquilidad sino la de otras personas,
que se preocupan y dependen de nuestro trabajo diario.
3). para finalizar, si luego
de haber leído estas breves pero puntuales indicaciones sientes que necesitas
psicoayuda, lo primero que debes tener presentes es recurrir a tus redes de
apoyo (amigos de confianza, familiares, profesionales en psicología) para
orientarte en cómo superar las
dificultades que puedes estar pasando. Recuerda
siempre que, no estás solo o sola
cuando así lo deseas.